Estes son los ayuntamientos que integran el geodestino: A Estrada, Agolada, Dozón, Forcarei, Lalín, Rodeiro, Silleda y Vila de Cruces.

Este es el corazón de Galicia. Y aquí, en lo más profundo de un hermoso bosque de pinos, robles y castaños se esconde "A Fervenza do Toxa", una fabulosa e hipnótica cascada de más de 30 m de altura. El agua cae entre rocas con tanta fuerza que al chocar contra el granito vuelve a subir, dando la sensación de que "llueve hacia arriba". Y el sonido del agua se funde con el de los pájaros en una melodía.

Es la magia de Galicia. Bosques ocultos que se conservan exactamente igual desde hace siglos. Un paisaje de cuento como el que rodea el monasterio de Carboeiro, fundado en el siglo X.

Estamos en el valle del río Deza, el centro geográfico de Galicia y Lalín es su capital, famosa por su multitudinaria "Festa do Cocido".  Cerca de A Estrada se encuentra uno de los pazos emblemáticos de Galicia. Es el Pazo de Oca, "el Versalles gallego", con sus románticos jardines, fuentes y paseos de camelias.
 

Patrimonio

Un monumento reconvertido para uso hostelero llama la atención: el convento de Aciveiro, en la parte alta de la Serra do Candán. El convento comenzó a construirse en el año 1135 y sigue la estructura cisterciense.

Si bien, cabe destacar también otros siete monumentos de la zona distinguidos con la declaración de Bien de Interés Cultural: las iglesias de San Salvador y Santa María de Vila de Cruces; Santiago de Tabeirós en A Estrada; Santa María de Abades y San Pedro de Ansemil en Silleda; así como los grabados rupestres de San Xoán de Tuiriz en Vila de Cruces y los de la Pena da Carballeira en Agolada.

Tanto ahí como en otros puntos del geodestino se detecta una presencia clara de la nueva cocina de autor, pero que no puede desbancar a la tradicional, con el cerdo mandando en los cuatro puntos cardinales y sobre todo en el Carnaval, una fiesta popular milenaria que se celebra por todo o alto.

Como curiosidad, aún quedan en pie algunas alvarizas, esas construcciones circulares erguidas para proteger las colmenas de la gula del oso, un plantígrado muy abundante en la Galicia de ayer y que ya solo se divisa en las tierras de Lugo oriental.

Espacios naturales

Montaña de interior. Niebla en otoño e invierno, hermosos paisajes gélidos. Las Brañas de Xestoso, en alto, conforman el primero espacio natural protegido. La Serra do Candán es el segundo, y, más al oeste, los Sobreirais do río Arnego, una corriente que va a alimentar el embalse de Portodemouros, limítrofe entre las provincias de A Coruña, Lugo y Pontevedra.
 
En Lalín, la Fraga de Catasós tiene la declaración de Monumento Natural. Se trata de un bosque autóctono ciertamente no muy conocido y, por eso mismo, de mucho más valor ya que se encuentra en excelente estado de conservación.

En el norte el sistema fluvial Ulla-Deza, entre prados y grandes pazos, y al oeste el Monte Faro, con una ermita en lo alto, completan la relación de espacios de la Red Natura.
  

Fiestas y gastronomía

El cocido es el eje de la gastronomía del geodestino. Lalín no desperdicia esa oportunidad y su Feira do Cocido (Fiesta de Interés Turístico Nacional) revive cada año con el carnaval.

También es muy concurrida la Festa do Gaiteiro de Soutelo, en Forcarei, que cuenta con la declaración de Fiesta de Interés Turístico de Galicia. No lejos, en Vila de Cruces, la Festa do Galo de Curral está considerada de Interés Turístico de Galicia, mientras que, en A Estrada, otra cita declarada de Interés Turístico Internacional se convirtió en polo de atracción: la Rapa das Bestas de Sabucedo, la lucha milenaria entre el hombre y el caballo salvaje.

Metidos en agosto es la localidad de Bandeira la que reclama la atención, con su Festa da Empanada, existente desde 1974. El lacón es honrado cómo se merece en Silleda. Miel y quesos completan el mapa gastronómico, el primero en Codeseda y los segundos en Vinseiro y Callobre.

Durante el carnaval en varias zonas tienen lugar los Altos de los Xenerais do Ulla, normalmente el fin de semana anterior al martes de carnaval, en los que se que cantan los “vivas” y se dan los “atrancos”.

DESTACADO: Fervenza do Toxa y Monasterio de Carboeiro

El río Toxa cae en cascada en la conocida Fervenza desde veinticinco metros en caída vertical esculpiendo la roca entre un inmenso bosque de robles y castaños. Este impresionante paraje está comunicado por agradables senderos con el Camino del Sudeste a Santiago y también con el Monasterio de Carboeiro y la hermosa ermita gótica de San Pedro de Ansemil.

El monasterio de San Lourenzo de Carboeiro, se emplaza a orillas del río Deza y está casi oculto en la espesura del bosque. El monasterio está considerado una joya del románico ojival gallego y fue mandado edificar en el año 936 por Gonzalo y Teresa, Condes de Deza.

 

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